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Inde Mirulof Denait

jueves, diciembre 28, 2006

 
Esta ha sido una navidad particular, claro, que siempre al llegar el final de año y recuerdas la navidad del año anterior puedes hacer una comparación con respecto a todas las situaciones en esa fecha con respecto a la actualidad y no puedes evitar preguntarte: como será la navidad del año que viene? Qué será diferente? Quien estará y quien no? Que será de mi vida de aquí a un año?.
Comparando esta navidad con respecto a la del año pasado, tengo mucho que agradecer. He descubierto mis capacidades profesionales y me he dado cuenta que el cielo es el limite al momento de aspirar cosas buenas.
Quince días antes de navidad, pedí en voz alta que algo emocionante pasara en mi vida, no tenía idea que iba a obtener respuesta tan rápido! Pero esa es otra historia...
La cena navideña del 24 fue completamente familiar e íntima: papá, mamá, mis dos hermanos, un primito y yo.
Brindamos por las circunstancias que nos están haciendo vivir juntos de nuevo, después de casi diez años cuando nos separamos (geográficamente) buscando nuestros propios caminos.
Celebramos y agradecimos nuestros triunfos individuales y familiares.
Recordamos nuestros momentos de bonanza y de necesidad y reafirmamos que gracias a ellos, somos hoy en día quienes somos.
Mi mamá le pidió disculpas a mi hermano mayor por aquella vez que lo golpeó con ira cuando él solo era un niño. El le agradeció la educación recibida así como cada regaño.
Mi papá habló de su infancia y de todos los sacrificios que su papá tuvo que hacer para brindarle educación.
Mi hermano habló de cómo el dinero ahora le da risa, después de tanto trasnocho y esfuerzo por ganarlo, dice que hoy en día trabaja por su tiempo y no por su cuenta bancaria; que no vale nada que tengas salud, dinero y amor, si nunca tienes tiempo para disfrutarlos. Me aconsejó que cada vez que le dijera a mis amigos o las personas que amo “no tengo tiempo...” me preguntara a mi misma: “pero a quién se lo estoy dando?”
Mi mamá habló mucho de la familia y de las difíciles situaciones que ha tenido que superar: la muerte de una hija, de una hermana, de mamá y de papá. De cómo me salvó la vida con sus manos cuando yo era una bebé. Nos habló de que debíamos siempre estar unidos porque algún día ellos no estarían con nosotros. Que debíamos convertirnos en un apoyo infinito unos con otros. Que nunca peleáramos por dinero.
Yo siempre le he expresado lo devastador que representa para mí tan solo pensar en la idea de perder algún ser querido, ese, es mi peor temor en la vida. Ella me contesto que es realmente lamentable, cuando pierdes a alguien sintiendo que no apreciaste al máximo los momentos en vida con esa persona. Que si has amado con el alma a alguien, y no has temido demostrárselo con palabras o acciones EN VIDA, entonces ni siquiera llorarías su muerte como si fuera una tragedia.

Cerrar capítulos en la vida no es nada fácil, supongo que a algunas personas les cuesta mas que a otras, y yo soy una de esas. Quiero mas que nunca tomarme las cosas con calma, y tratar de entender que lo que será para mi, será. Que la vida es ahora y que uno no debe planificarse la vida, solo obrar bien, amar y proyectar la mente hacia una vida feliz, cómo llegar ahí, se irá revelando poco a poco...

Felices fiestas para todos...







Comments:
Si, es muy díficil cerrar círculos en la vida y más cuando esos círculos más bien parecen un espiral. Pero querer es poder y màs cuando se tiene el apoyo de la familia, que es lo más importante.

Felices fiestas y Saludos!!! ;-)
 
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